sábado, 19 de abril de 2014

Personas tóxicas

Hoy en la sección de libros de un centro comercial vi un libro con un título que decía: "Gente tóxica". No lo cogí, ni leí siquiera nada más que esas dos palabras, pero me ha sugerido lo difícil que puede resultar eliminar de nuestra vida a personas que no nos hacen bien.

Cuando se trata sólo de conocidos, compañeros o amigos puede ser menos doloroso, aunque depende de la relación establecida, seguro que es una decisión complicada. Ahora yo voy más allá. ¿Qué pasa cuando ocurre con personas más allegadas e incluso con familia? Ya no se puede actuar tan a la ligera. Bueno, sí se puede, pero la educación social que nos han impartido nos hace pensar que no se debe.

Sería interesante apartar con total libertad al cuñado pesado o a la tía impertinente de turno. Sin embargo, cuando esa decisión afecta a la gente que queremos estamos coartados para actuar sin cortapisas y desaparece la posibilidad de eliminar a la gente tóxica de tu vida como lo haríamos con cualquier otro sujeto.

Existir existen, señores. Hay gente maliciosa, nociva, destructora, entremetida, cruel... y admiro a quienes tienen la fortaleza de alejarla de su camino y continuar con paso firme hacia delante.