domingo, 8 de junio de 2014

La calle

Ayer mucha gente salió a la calle a manifestar su negativa a las prospecciones petrolíferas en Canarias. La Avenida de Anaga en Santa Cruz de Tenerife se llenó de particulares que gritaron, enarbolaron pancartas, banderas y que hicieron de la calle un escenario particular.

Y es que la calle es lugar de todo tipo de congregaciones, ya sean festivas (como un coso de Carnaval o una romería), religiosas (como procesiones o peregrinaciones) y lúdicas en general. Es también un punto de encuentro social donde los ciudadanos hacen vida y expresan su conducta.

Cada vez que usted sale de casa, y si atiende a cierta rutina en cuanto horarios se refiere, se cruzará con viandantes o conductores a los que puede que no conozca, pero con los que ha establecido cierto vínculo. Si se cruza camino del trabajo con un barrendero, con una frutera reponiendo los cestos de mercancía o con los padres que llevan a los niños al colegio, ha genereado una relación singular, por lo que tiene de anecdótica y de casual, pero que ya forma parte de su quehacer cotidiano.

Somos seres sociales y tradicionalmente los lugares de encuentro: como calles, plazas y mercados, han sido espacio de participación, de distensión y de interactuación. Salir, dar una vuelta y ser partícipe del estado de la ciudad sólo se refleja en sus rincones, en los más abiertos y los más recónditos, pero la vida social se hace a pie de calle.

domingo, 1 de junio de 2014

Canarias negra

El jueves 29 de mayo de 2014 el Ministerio de Medio Ambiente del Gobierno de España aprobó la realización de prospecciones petrolíferas en aguas de Canarias. Un día antes de celebrar el día del archipiélago, nos dieron el "regalito". Muchos meses antes se han manifestado miles de personas de todas las islas y han emprendido diversas acciones para simbolizar la negativa de esta tierra a buscar el oro negro en nuestro territorio, que presume de la posesión de grandes espacios naturales.

El Gobierno regional se ha posicionado en contra de las prospecciones desde el primer momento. Igualmente lo han hecho los representantes de instituciones insulares, como los gobernantes de los Cabildos de Lanzarote y Fuerteventura, y varios ayuntamientos a nivel de todas las islas. Por supuesto, cabe reseñar las actuaciones ciudadanas; se han realizado manifestaciones y protestas en múltiples ocasiones, se han recogido firmas, se ha tratado esta cuestión en diversos espacios mediáticos, e incluso se llegó a porponer hacer un referéndum.

Pero todas estas actuaciones, institucionales y civiles, parecen tener escaso valor cuando se habla de intereses. Y es que no hablamos de cualquier cosa. Aquí entran en juego las grandes empresas internacionales que mueven los gobiernos de todas las naciones. Vaya, que el pez grande se come al chico, por muchos pequeños que haya.

En una tierra que goza de variadas fuentes de energías limpias, poco se habla de las renovables, porque aunque se proponga, porque abunda el sol, el viento y la fuerza maremotriz en todo el archipiélago, no interesa apostar por ello cuando están las grandes detrás. No gobiernan personas, gobiernan empresas con intereses gananciales. Mientras tanto, Canarias grita NO, pero nadie la escucha.