martes, 30 de junio de 2015

Diferentes pero iguales

Hoy se conmemoran 10 años de la aprobación del matrimonio igualitario en España. Desde entonces miles de parejas del mismo sexo se han casado y han adquirido lo que se convirtió en un derecho fundamental. La semana pasada ocurrió lo mismo en Estados Unidos y el mundo entero enarboló la bandera multicolor del arcoiris.

Hoy los ciudadanos españoles somos más tolerantes. La legislación nos equipara a todos sin que exista razón de discriminación por el sexo, la raza o la religión, entre otros aspectos. Sin embargo, la adopción por padres homosexuales o la familia monoparental está siendo otro dilema, pero hasta los anuncios de Coca Cola le paran las patas al conflicto.

Esta mañana decía Iñaki Gabilondo que hemos sido educados para ver la diferencia y es cierto. Desde pequeños nos señalan lo desigual, lo diferente; pero gracias a las libertades hemos conquistado terreno. No puedo dejar de señalar a los activistas de colectivos como LGTB, que se han dejado la piel por conseguir un país más justo.

Anoche leí que el Papa Francisco abre las puertas de la Iglesia a homosexuales, divorciados y parejas de hecho. Mi comentario al respecto es que ha ganado la cordura, y no podía ser de otra manera, porque aún siendo diferentes, somos iguales.


viernes, 26 de junio de 2015

30 segundos

El servicio de correo electrónico de Google, Gmail, ha dispuesto una opción que ha revolucionado las comunicaciones. Nos facilita la manera de poder rectificar a la hora de enviar un correo electrónico y cancelarlo en los 30 segundos siguientes al envío.  Ofrece una segunda oportunidad, la de deshacer el entuerto.

Imagínese que contamos con ese medio minuto cada vez que somos conscientes de que nos equivocamos y pudiéramos dar marcha atrás. Sería un alivio en el caso de cometer un mal gesto o pronunciar una palabra hiriente u ofensiva. La verdad es que muchas veces nos damos cuenta de que hemos errado tras sólo un instante de cometer la equivocación.

30 segundos no es nada, pero puede darle la vuelta a la situación por completo. Llámelo salvación o arrepentimiento, pero estoy segura de que, de haber existido antes, habría salvado a más de uno y habría evitado muchos dolores de cabeza. Para más inri, el correo electrónico ha llegado a ser un medio fiable y cuantificable incluso hasta en un juicio, si no que le pregunten a Urdangarín.

lunes, 22 de junio de 2015

Hijos a cargo

En los procesos selectivos de algunos trabajos, una vez que se está realizando la entrevista, el candidato debe responder normalmente a una serie de preguntas. Estas cuestiones deberían referirse exclusivamente a cuestiones profesionales, pero sé por mi experiencia y la de personas allegadas que no es así en muchos casos.

Si la aspirante es una mujer es frecuente que le interroguen sobre si está soltera, si tiene hijos o si piensa tenerlos en breve. Esta serie de planteamientos, aparte de inmiscuirse en el terreno personal, hasta están penados en países como Reino Unido. No es únicamente que se trate de un estereotipo, sino que se ve favorecido por el comportamiento machista.

Deduzco que los entrevistadores sobreentienden que será la mujer la que acuda a recoger al niño si está enfermo o a llevarlo al médico en lugar del padre de la criatura. Y por la misma circunstancia, cogerá más bajas, necesitará tiempo para ejercer la lactancia y un largo y nefasto etcétera que no hace más que encasillar el papel femenino en el terreno laboral.

Abogo por una conciliación de la vida familiar y profesional tan estricta para los hombres como para las mujeres. Desde aquí rompo una lanza en favor de esos padres que sí saben preparar una papilla a sus hijos, que les ayudan a hacer las tareas extraescolares o que acuden a una entrevista o una conferencia con sus hijos en brazos.




domingo, 14 de junio de 2015

Oiga, usted

En la reciente campaña electoral escuché a alguien quejarse del tratamiento que desde los partidos políticos se hace a los votantes, puesto que se dirige a ellos tuteándoles: vota, decide, etc. y encima en tono imperativo. Aunque supongo que en este caso se hace con la intención de demostrar cercanía y confianza entre los ciudadanos y los representantes.

Pues bien, en el trato cotidiano entre iguales, parece suceder lo contrario. Si eres una treintañera y un dependiente te llama "señora", poco menos que te ofendes, o al menos te vas con mal humor del establecimiento. Y ni le cuento si se refieren a usted como "doña". Más que un tratamiento para distinguir la clase social parece anticuado y encasillarte en los octogenarios.

El trato de "usted" transmite respeto. Así nos lo han transmitido para referirnos no sólo a personas mayores, sino también a quienes no conocemos o con  quienes no tenemos confianza. Otra cosa es que el individuo en cuestión pida que se le tutee. Aún así, he presenciado como jóvenes se dirigen a un profesor de avanzada edad o a un médico igual que lo harían con un colega; y será por una cuestión generacional, pero reconozco que me sorprende y me parece una falta de respeto, del nivel de "muchacha".

Personalmente considero que la opción más correcta es establecer la distancia hasta que el destinatario solicite lo contrario. En muchas ocasiones, el trato diario predispone a tutear a compañeros o semejantes, pero hay quien no entiende su nombre sin el don por delante. No lo creo una cuestión de clase, sino de humildad.


domingo, 7 de junio de 2015

Con las manos

Desde que somos niños vamos aprendiendo a mejorar la función y la motricidad de nuestras manos. Empezamos agarrando objetos, luego pasamos a jugar en el patio dando palmas y cantando a coro algunas estrofas y más tarde hay quienes se convierten en verdaderos artistas gracias a lo que son capaces de construir manualmente.

Podría hablar de pintores, mecánicos o cirujanos, pero quiero referirme a unos creadores propios de mi tierra: los alfombristas de la Villa de La Orotava. Son ellos quienes cada año en conmemoración del Corpus Christi dan lugar a auténticas representaciones de arte efímero. Construyen escenas religiosas a enorme proporción, donde el lienzo es el suelo de la plaza del Ayuntamiento y miles de observadores son testigos de semejante obra cultural y patrimonial.

Las manos son las artífices de la creación del sentimiento y la emoción que transmite cada escena, construida con tierra volcánica como materia prima. Cada pliego del rostro y cada sutil matiz es conseguido por unas manos virtuosas y expertas, que son capaces de transmitir emociones y que año tras año son las protagonistas de esta expresión artística sin parangón alguno.

En este 2015 se plasma el motivo de la familia que recoge una obra de Juan Bautista Maino y que se ubicará en el tapiz central de la plaza. Ésta como otras temáticas no dejan de impresionar al espectador, dejando a un lado el concepto religioso. Para admirar el arte no hace falta tener más creencia que la mera disposición de apreciar la labor que construyen estas manos creadoras.


lunes, 1 de junio de 2015

Con traje típico

Estos días miles de niños se ataviaron con el traje típico canario, bien con la vestimenta tradicional o con la de campesino, para conmemorar la celebración del Día de Canarias. Esta festividad se ha hecho muy popular en los colegios y es una ocasión ideal para compartir con los compañeros la comida y el folclore de nuestra región.

Los empresarios más hábiles han sacado tajada comercializando réplicas de los trajes populares de cada lugar. Dada la circunstancia económica en que llevamos enclavados algunos años es común que abunden estas prendas, que son más económicas y más ligeras, puesto que suele ser en verano cuando suceden la mayor parte de romerías y festejos.

Sea de una forma o de otra, con el laborioso traje de La Orotava o con la ropa de campesino «Made in China», lo importante es compartir y disfrutar de las tradiciones isleñas. Aunque se debe respetar la idiosincrasia regional y evitar hacer combinaciones molestas a la vista, como adjuntarle a la falda de maga unos tenis tipo Converse. Vaya por delante el respeto y la conservación de las costumbres de nuestro pueblo. Cantemos, bailemos al unísono y brindemos con vino de la tierra.